miércoles, 28 de enero de 2009

Inundaciones


Madre mia, estoy empezando a pensar que alguien me ha echado un gafe. No salgo de una y me meto en otra, aunque la de ayer fué mas el susto que otra cosa. Pasé un miedo de la pera. Veía toda la casa llena de agua. Pero os cuento como fué la cosa.

Para empezar, el bus tardó como media hora en llegar, cuando llegamos a la altura de la autopista de Rekalde, la cosa ya empezaba a pintar muy malamente. El agua inundaba toda la carretera, bajaba a muy buena velocidad y en algunos sitios empezaba a subir ya en las aceras.

A la altura de la rotonda de la ferreteria, se veia el agua que bajaba a toda leche desde el Arraiz, al bus le costó bastante porque el agua lo tiraba para atrás.La cuesta que baja de Uretamendi era un rio marron, no se veia la carretera y la gente que bajaba del Peñaskal no podía cruzarlo.
Y eso fué el principio. Luego la cosa empeoró. Las fotos estan cogidas de la web del Correo.


Mi odisea personal empezó subiendo la cuesta , ya bastante cargadita de agua. Cubria por los tobillos, pero como está tan empinada, me moje hasta las rodillas de lo que salpicaba. Al llegar a casa, se oían ruiditos de goteras por todas partes.

Desde la ventana del baño podía ver como poco a poco, todo el largo de la carretera se iba llenando de agua, acercándose peligrosamente a mi puerta. Salí a coger dos sacos de piedras para gatos que tenia, para ponerlos junto a varias toallas haciendo un poco de barrera.

Que miedo, no podeís imaginar. Ahora, con calma, me doy cuenta de que no hubiese pasado nada, pero en ese momento solo ves el agua saltando por los escalones, por encima de los tiestos y un palmo de agua arremolinandose en tu puerta entrando poco a poco hacia casa y haciendo un ruido tremendo.











Un vecino me puso un tablón de madera, haciendo un poco de barricada, que si fué eficaz. Menos mal que según dejo de llover, el agua desapareció en pocos minutos y solo quedó como rastro un montón de barro y mogollón de ramas en la puerta.

En cuanto haga buen tiempo, tengo que fabricarme un murillo para evitar que esto vuelva a pasar. ¿Alguien sabe algo de albañilería?

Pues eso, a ver si paso ya esta mala racha, que ya me estoy hartando un poco.

Hasta otra, corazones.

sábado, 24 de enero de 2009

Relax


Como parece que me voy espabilando del mal rollo que me ha sobrevenido estos días (sin comerlo ni beberlo), pues el viernes decidí darle un empujoncito a mi cuerpo y a mi espíritu. Os cuento.

Por la mañana me fuí al Spa de Jardines de Albia. Me habían hablado mucho de el y me apetecía probar.

Fué una experiencia muy chula. Te pasas allí una hora y media gozando como una loca.

Empiezas con el baño turco, (que no tiene nada que ver con el baño turco de Turquía, por cierto) y estás allí como unos 10 minutos. Juegan con la aromaterapia en los diferentes habitáculos. En este huele a eucaliptus. Ahi ya empiezas a sudar a lo bestia, eliminando todo lo que te sobra.
Luego vas a otra sala, a 45º, que huele a citricos. Estás menos tiempo, unos 8 minutos. No hay tanta humedad como en el turco, pero aun asi, sudas un montón. Y si te frotas el cuerpo salen churritos de pieles muertas.
De ahí, a la ducha bifásica, que es donde pegas el grito del día, porque pasas de los 45º a agua fría. En principio no mola nada, pero luego te refrescas y da mucho gustito.

Y la última sala, 5 minutos a 50º oliendo a lavanda. Yo tuve que salir porque me mareé toda.

Y la piscina, el momento final, después de pasar por el pediluvio, que son chorritos de agua fría en las pantorrillas. Dicen que es bueno para las varices.


En la piscina haces un circuito por diferentes chorros enfocados a partes del cuerpo como gluteos, muslos, lumbares, cervicales... y están las camas de agua que son chorritos en todas partes y el geiser, que no se para que es pero te dejas flotar y es genial.

Y de ahi al jacuzzi, y a las camas calientes, donde estas un rato. Son como divanes de piedra caliente.

Y para acabar, un te. Vamos una gozadita.

Por la tarde fui a alimentar el espiritu, a la Gran Via, a ver las esculturas de Rodin. Son espectaculares, os recomiendo que vayais a verlas. Estaran hasta el dia 14 de febrero. Saque algunas fotos, pero no me quedaron muy bien, pero os las dejo para que os hagais una idea.









Y ya, mucho mejor de cuerpo y espiritu os digo,


Hasta otra, corazones

miércoles, 21 de enero de 2009

Aquellas pequeñas cosas


En unos días llenos de tristeza, desilusiones, duras palabras y decepciones, ayer, la vida me puso en el camino a mi mejor amigo de la adolescencia. Hacía años que no nos veíamos y como siempre, me iluminó el dia y hoy me he estado acordando de nuestras batallas, nuestras aventuras....

Recordé aquellas interminables conversaciones telefónicas y a mi madre gritando: "pero bueno, que llevaís una hora hablando, ya está bien". Cada vez que el teléfono sonaba a horas intempestivas, yo sabía que era él.
Y en las reuniones de los jueves, mas de lo mismo, nos poníamos en una esquinita del sofá y no parabamos de hablar, de solucionar los problemas del mundo, hasta que alguien decía: "pero bueno, vosotros a que venís, ¿quereís hacer caso de esto, que es importante?

Hemos compartido montes, pintadas en la calle, manifestaciones, bailoteos en las fiestas de Rekalde, discusiones..... Los días de su cumple no fallaba, telefonazo: "Hola, llamo para que me felicites, que es mi cumple", pese a que a mi, nunca se me olvidaba ese dia.

Pero, en algún momento, la vida nos empezó a separar, poco a poco, sin darnos cuenta.

Pero ayer, nos volvimos a ver, y, como siempre, volvió a iluminarme el día. Gracias Dabid.




Os dejo esta preciosidad.


Hasta otra, corazones



sábado, 17 de enero de 2009

El amigo canino de Simon


¿Os acordais del gato de Simon? Pues resulta que tiene un amigo canino.



Con todo mi cariño para mis amigos caninos, Zuri y Baku.

Hasta otra, corazones

lunes, 12 de enero de 2009

Gaza


Me he puesto ha curiosear el blog de un amigo de nuestra Montse y he encontrado esto. Leedlo, es un p0co largo pero merece la pena, está muy bien.

"Ni una palabra, ni un sólo recuerdo, ni una señal de dolor por los cientos de muertos: mujeres, niños, ancianos y militantes de Hamás, también ellos son seres humanos. Hogares, edificios enteros, ministerios, escuelas, farmacias, comisarías de policía, hospitales hechos pedazos. ¿A dónde ha ido a parar vuestra compasión? ¿Cómo podeís seguir callados o disculpar siquiera la permanente política de agresión israelí?

Los habitantes de Gaza y de los Territorios Ocupados (West Bank) –todos palestinos– están pagando el precio del terrible fracaso de la comunidad internacional, incapaz de obligar a Israel a respetar la ley internacional y a poner fin a su sangriento colonialismo. Es cierto que Hamás, con sus cohetes, constituye también una amenaza para los colonos israelíes y para la población civil que debería ser condenada. ¡Basta ya con la impunidad de Israel y el continuo chantaje de sus líderes!

Desde 1967, Israel ocupa militarmente los territorios palestinos. Una ocupación brutal: el robo descarado de la tierra, la demolición de casas, los checkpoints donde los palestinos son continuamente humillados y hostigados; las colonias que no dejan de construirse de forma ilegal y que se apropian no sólo de la tierra, sino de todos los recursos acuíferos, destruyendo las cosechas; y miles de prisioneros políticos que ni siquiera tienen el derecho a recibir visitas de su familia.

Vosotros, líderes políticos: ¿acaso no habéis visto alguna vez la desesperación en los ojos de un campesino palestino que, desesperado, se abraza al tronco de su olivo mientras los bulldozers intentan desarraigarlo, mientras los soldados le golpean con sus rifles para obligarle a soltarlo? ¿O a una mujer dando a luz detrás de una roca mientras su marido corta el cordón umbilical con una piedra porque los soldados israelíes, simplemente, no le dejan cruzar el checkpoint para ir al hospital? ¿Habéis visto a Um Kamel, desalojada de su casa, construida con el sacrificio de toda una vida, porque los fanáticos judíos –no las víctimas del Holocausto, sino los de Brooklyn–, piensan que esa tierra les pertenece por mandato divino y que, por lo tanto, tienen derecho a ocuparla para construir otra colonia judía en el corazón de la ciudad vieja de Jerusalén?

¿No habéis visto, quizá, a los niños de los pueblos de los alrededores de Tuwani, al sur de Hebrón, que para ir a la escuela se ven obligados a caminar durante más de una hora y media porque los judíos han construido una colonia en el medio de la carretera que une las dos ciudades y si les ven pasar por allí son atacados con piedras y otros objetos? ¿O a los pastores de Tuwani, que ven las aguas de sus pozos envenenadas por los fanáticos y no pueden dar de beber a su ganado? ¿O la ciudad de Hebrón, reducida a la nada porque 400 colonos judíos han ocupado la ciudad vieja que, a su vez, se ha visto rodeada por miles de soldados que han expulsado de sus casas a sus propietarios palestinos obligándoles a cerrar más de 840 comercios?

¿No habéis visto, acaso, el muro que atraviesa calles y barrios; que roba tierras de cultivo; que separa a las familias palestinas; que se apropia de la tierra fértil y de los acuíferos en beneficio de Israel? ¿No habéis visto a los pacientes de cáncer esperando en el paso de Eretz el permiso para poder recibir tratamiento en los hospitales y siendo detenidos y obligados a regresar por “razones de seguridad”?

En los últimos 19 meses, 283 personas han muerto por falta del cuidado médico que deberían haber recibido en algún lugar del extranjero porque no les permitieron cruzar a pesar de recibir garantía por parte de los médicos israelíes, pertenecientes a un grupo de defensores de los Derechos Humanos.

¿Habéis sentido el frío de las noches de Gaza, un frío que atraviesa los huesos porque no hay ni luz, ni combustible?¿O acaso sabéis de los bebés prematuros nacidos en el hospital de Shifa, cuyos pequeños cuerpos luchan por sobrevivir, pero que mueren irremediablemente cuando su incubadora se queda sin luz durante media hora?

¿No habéis visto el miedo, el terror en los ojos de los niños, sus cuerpos destrozados? Ciertamente, el miedo de los niños de Sderot no es diferente y los cohetes de Hamás también pueden matar, pero, al menos, ellos tienen un lugar donde cobijarse y, afortunadamente, nunca han tenido que ver sus edificios bombardeados, docenas de cuerpos desmembrados o aviones que lanzan bombas de fragmentación sobre sus cabezas. Una sola muerte es ya mucho, pero el “número de muertes” también suma en la cuenta del horror.Desde 2002, 20 personas han muerto debido a los cohetes, mientras que en Gaza miles y miles de casas han sido destruidas y más de 3.000 gazawis han resultado muertos, incluyendo cientos de niños que no tenían nada que ver con el lanzamiento de cohetes.

Cuando, en las manifestaciones que están teniendo lugar en toda Europa, se queman banderas israelíes, vosotros, los líderes políticos, mostráis enseguida vuestro enérgico rechazo, gritáis vuestra condena a los cuatro vientos. Estáis en vuestro derecho. Yo no quemo banderas de Israel, ni las de ningún otro país, y creo que también Israel tiene derecho a existir, pero me hubiera gustado oír también vuestros gritos de rechazo y de pena ante todas estas muertes y toda esta destrucción debida a la arrogancia y a la crueldad de un Estado que ni siquiera respeta la ley internacional. Me hubiera gustado oíros mandar a Israel que cese de disparar, que ponga fin al bloqueo de Gaza, que detenga la construcción de colonias en los territorios ocupados, que acabe con la ocupación militar, que respete y ponga en practica las resoluciones de las Naciones Unidas. Porque esa y sólo esa sería una forma efectiva de acabar con su inseguridad.
Y, de paso, escuchen también a los miles de ciudadanos israelíes que se manifiestan en Tel Aviv. Escuchen lo que gritan: “No queremos ser enemigos, detengan la ocupación, detengan la masacre”.¡Dios, en qué mundo tan horrible estamos viviendo!"

Luisa Morgantini es Vicepresidenta del Parlamento Europeo

Traducción de Pilar Salamanca

Hasta otra, corazones.

PD: Gracias Montse, por tener blogs tan interesantes.
PD 2: El texto aparece en "escolar.net". Echadle un ojo.




domingo, 11 de enero de 2009

A vueltas con la religión


No, no me he olvidado del blog, simplemente he andado un poquito baja de moral estos dias, pero aquí estoy de nuevo, para luchar contra mi mal rollo. Y vengo peleona....



Mañana se ponen en marcha los buses ateos en Madrid y en Barcelona. Supongo que ya sabeís de que va el tema, pero os lo cuento por si acaso. La idea nació en Londres, donde a una publicista, al ver un anuncio de un grupo evangelista en un bus, se le ocurrió que los ateos también podían hacer algo parecido y se le ocurrió la frase "Probablemente Dios no existe, deja de preocuparte y disfruta la vida".




Los cristianos van a contraatacar con otra frase similar.

Queria aprovechar esta noticia para explicaros el porqué de mi ateismo convencido.

Yo estudié durante 9 años en un colegio de monjas, donde me enseñaron religión, me enseñaron una parte muy derechista de la historia y me hicieron chupar misas a tutiplén.

Nunca me convencieron mucho las cosas que me contaban. No hice la comunión, y suspendía religión de vez en cuando.

En el último curso que pasé allí, un miércoles de ceniza, después de la misa de rigor, una niña de 6 años se cayó por el hueco de la escalera y se mató. Eso, a mis 14 años, me hizo pensar mucho. Nunca entendí porqué ese Dios tan buenísimo y estupendísimo del que tanto me hablaban podía permitir que eso pasara. Esa niña tenía toda la vida por delante, no le había dado tiempo a hacer nada malo y sin embargo allí murió, ademas de una forma bastante cruel.

Cuando ese verano me fuí al campamento que organizaba la iglesia de mi barrio, le pregunté al cura sobre el tema, y él, muy educadamente me explicó que los designios del señor son asi, y que esa niña estaba mejor con el señor. Y yo, por supuesto le contesté que una leche, y el, como sólo saben hacerlo los curas me llamó ignorante.

A medida que me fui haciendo mayor, fuí investigando mas y mas y me reforcé en mi ateismo.

La religión cristiana son todo amenazas, miedos, castigos... Las iglesias son oscuras, con cuadros llorosos, de gente que sangra y sufre, cuando debería ser al revés, la religión debería ser un lugar donde sentirte seguro, donde encontrar consuelo.

Y luego, ves todo lo que ves, y oyes todo lo que oyes, y alucinas. Y cuando intentas borrarte de la iglesia, es prácticamente imposible hacerlo, todo son trabas y problemas, pero ellos cobran por ti.

En fín, no me explayo mas, aunque podría dedicar el resto de las entradas de este humilde blog a explicaros cosas sobre esta nuestra impuesta religión. Tal vez lo haga en otra entradita..... mmmm, si, creo que sí....

Hasta otra corazones.

jueves, 1 de enero de 2009

Creci en los 80

Cuando todo el mundo empieza el año nuevo haciendo planes de futuro, yo os planto este divertido video que me ha chivado mi hermano.

Es muy divertido. El grupo se llama El reno Renardo y cuentan cosas en tono heavy. Yo, de momento solo he escuchado esta canción, la de los 80, y las cosas que dicen son muy ciertas y ya de paso te echas unas risas.

Ahí os lo dejo, no tengo imaginación en este nuevo año para escribir mas, pero ya me explayaré otro dia en las aventuras y desventuras ochenteras.

Hasta otra, corazones y Feliz Año Nuevo